PROSCRIPCIÓN Y DEMOCRACIA: CUANDO EL PODER JUDICIAL DEJA DE SER INDEPENDIENTE DIJO MARTIN PEREZ REFERENTE DE PROVINCIA GRANDE

RIO GRANDE.- En su red social X, Martin Perez se pronunció sobre lo que acontece con la sentencia de la Ex Presidenta de la Nación, Una democracia real no proscribe, salvo cuando lo establece la Constitución en forma clara, legítima y con garantías para todas las partes. Una democracia plena permite que el pueblo elija libremente a sus representantes, sin tutelajes, sin censuras encubiertas, y sin maniobras que limiten la soberanía popular.
En la Argentina actual, la proscripción política no es un hecho abstracto ni del pasado. Lo estamos viendo con claridad: Cristina Fernández de Kirchner, dos veces presidenta y referente indiscutible para millones, ha sido apartada del escenario electoral a través de una sentencia judicial cargada de irregularidades, sin pruebas concluyentes y en el marco de un proceso que muchos califican como viciado desde su origen.
Esta situación no solo afecta a una persona. No se trata únicamente de Cristina. Lo que está en juego es algo mucho más profundo: el derecho del pueblo a elegir a quien considere mejor para representarlo. Limitar esa posibilidad es recortar derechos colectivos. Es decirle a la sociedad que su voto vale menos que el dictamen de un puñado de jueces que responden, no a la Constitución, sino a los intereses del poder económico y mediático.
Una democracia verdadera necesita un Poder Judicial que actúe con independencia, no un “partido judicial” que funcione como brazo ejecutor de decisiones políticas disfrazadas de justicia. Necesitamos jueces que garanticen derechos, no que operen en los márgenes del sistema para torcer el rumbo institucional.
La proscripción es un retroceso, sin dudas. Pero no es el final. Estoy convencido de que Argentina está llamada a dar muchos pasos hacia adelante. La historia lo demuestra: cada vez que se intentó callar al pueblo, el pueblo respondió con más fuerza, más organización y más participación.
El destino de nuestra democracia depende de cuánto estemos dispuestos a luchar por ella. Dependerá de cuánto trabajemos por la provincia, por el país, y por ese futuro justo y soberano que merecemos. Finalizo Martin Perez